domingo, 19 de agosto de 2012

Tras dieciocho años...


Han pasado dieciocho años desde la última vez que la Vuelta Ciclista vino a Pamplona. Dieciocho años que no han borrado la huella del ciclismo en nuestra tierra, ni han esquilmado la afición. La vieja Iruña ha despedido hoy la Vuelta esperando paciente bajo un sol que repartía sus rayos sin clemencia. Había expectación por ver de nuevo a los que habían volado por el tramo del encierro. Por reconocer a Contador, por ver a los navarros que corren en los distintos equipos (Imanol Erviti (Movistar Team), Gorka Verdugo y Juanjo Oroz (Euskaltel), Xabier Zandio (Sky) y Javier Aramendía (Caja Rural). Y por saludar a las glorias de antaño -y no tan antaño- que tantas jornadas de buen ciclismo nos han regalado: Fernando Escartín, Abraham Olano, Pruden y Miguel Induráin, Chente García Acosta...
Salida con Contador y Castroviejo ocupando las primeras posiciones
Pruden Induráin departiendo con Olano, Escartín y Chente

Fernando Escartín esperando la salida

Como los caracoles... con la casa a cuestas

La otra Vuelta se vive en los autobuses, en los espacios habilitados que quedan en la parte de atrás. Allí velan los otros, los que apenas aparecen en los medios, los que organizan los detalles.
Así son las guardias de los otros. Con la lavadora puesta y la secadora a punto para que los maillots estén listos para la siguiente etapa.
Así cuidan a los ciclistas, para que puedan hacer rodillo luchando con el calor.

A las siete el 18 de agosto


El termómetro de la plaza del Castillo marcaba 46º cuando apenas faltaban unos minutos para el inicio de la Primera etapa de la Vuelta Ciclista a España 2012. Era tarde de inusual calor en Pamplona, pero tarde de ciclismo que nadie se quiso perder. Una contrarreloj por equipos sirvió de aperitivo para una Vuelta norteña que saludó con calor del desierto.
El Caja Rural, equipo navarro, fue el primero en la salida, ataviados de uniforme sanferminero para lidiar con un toro de cuernos de cabra. En el mismo punto de partida aguardaron mientras comenzaba la cuenta atrás con Juan Mª Guajardo, voz de la vuelta,  y navarro, y Miguel Induráin haciendo de maestros de ceremonia.
La gente hacía rato que se había apiñado en el recorrido del encierro, en la plaza de toros o a la sombra de los árboles en la carretera de la Universidad. Otros esperaban en las terrazas de la plaza del Castillo con un vaso de bebida bien frío.
Pero cuando llegaron las siete de la tarde, todos olvidaron la bebida, el calor e incluso el cansancio de la espera porque lo único importante en esos momentos eran las bicis.

El Caja Rural corrió sin referencias, pero con la fuerza de sentirse en casa, al calor de los suyos. No pudieron con los equipos grandes, pero se manejaron con solidez por las conocidas calles de Pamplona y de la cuenca.
Los que sí tuvieron premio fueron los del equipo Movistar Team. Salieron los últimos, pero se alzaron con la victoria final, logrando diez segundos de ventaja sobre el Rabobank. Satisfacción plena en la escuadra navarra.


miércoles, 15 de agosto de 2012



Cerco de Artajona

El Cerco de Artajona es más impresionante si se llega a él a través del casco urbano, ascendiendo lentamente, encontrando en cada recoveco un poquito de ese pasado glorioso donde reyes, obispos y canónigos convivieron durante siglos. Porque Artajona también fue reino durante un breve periodo de mediados del siglo XII.
Una vez arriba, por unos instantes crees estar en la cima del mundo. Y el viento, que juega burlón con tus cabellos, trae aromas de espliego y manzanilla.
Si miras atrás, descubrirás las torres cúbicas que defendieron hieráticas la majestuosidad del lugar. Hoy quedan en pie nueve, pero debieron ser catorce. Y podrás admirar también la iglesia de San Saturnino  y los restos del donjón o torre del homenaje que permanecen como tronco talado para dar constancia de su existencia.